Durante esta cuarentena Eli y yo hemos podido jugar a muchos juegos de mesa, y uno de ellos es un clásico (aunque solo tenga 8 años) que ganó el premio Spiel des Jahres 2012: Kingdom Builder.
Personalmente, es un juego que todo jugador de juegos de mesa familiares debe tener… sí o sí. Al igual que el Aventureros al Tren, es un juego que podríamos denominar como el Monopoly de la nueva generación. Es sencillo, es bonito, es perfecto de duración, es para todos los públicos, hay que pensar y es súuuuuper divertido.
Como en casi todos los juegos, el objetivo final es ser el jugador con más puntos. En Kingdom Builder los puntos se consiguen cumpliendo los objetivos que nos indiquen las cartas de ‘contructores’, y en cada partida solo sacaremos algunas, así que la rejugabilidad es muy grande. Y es rejugabilidad REAL, ya que lo que cambian son los objetivos finales, no la forma de conseguirlos. Las cartas de objetivo son como estas:
Para jugar, en nuestro turno lo único que debemos hacer es jugar una carta de nuestra mano y colocar nuestros asentamientos en casillas del tablero que sean del tipo de terreno de la carta que acabamos de jugar. Existen 5 tipos de terreno donde edificar (no se puede edificar en agua o en montaña, pero luego hay excepciones a eso, que le dan una vidillaaaa):
Una vez jugada la carta, colocamos en ese tipo de terreno 3 de nuestros asentamientos (comunmente llamados casitas). La regla principal al contruir en Kingdom Builder es que los asentamientos deben estar adyacentes a otros que ya tengamos. Si no podemos colocar un asentamiento porque ya no hay hueco adyacente a otro y que esté en el terreno en el que lo tenemos que colocar, podemos ponerlo en otro sitio, siempre respetando el tipo de terreno de la carta recién jugada. Por ejemplo, los asentamientos azules están todos adyacentes:
Una vez colocadas nuestras 3 casitas, robamos una carta y termina nuestro turno. ¿Y ya está? Casi. El tablero se coloca de manera diferente en cada partida. Tenemos 8 módulos de los que colocaremos solo 4 por partida:
Y cada uno de esos módulos tiene unas fichas determinadas que al conseguirlas (edificando una casita al lado de la ficha), nos dará una ventaja en futuros turnos. Eso nos permitirá construir más de 3 casitas en cada turno. Cuantas más fichas de estas especiales tengamos, más podremos construir cada turno:
Y no solo eso, porque algunas de las fichas nos dan otro tipo de ventajas, como poder mover uno de nuestros asentamientos a una casilla de agua, mover asentamientos a 2 casillas de distancia, etc. Son fichas bonus necesarias para ganar. Se pueden usar en cada turno y su uso es opcional, si no quieres usarlas, no lo hagas, peor para ti…
Y ahora sí que está todo explicado, solo quedarían las minireglas que tiene todo juego, pero básicamente, eso es todo. Así que hay que tener en cuenta el tipo de terreno donde cosntruyes, los objetivos marcados al principio de la partida y las fichas de bonus que puedes conseguir. Y esto da una estrategia INCREÍBLE. Creedme.
Solo puedo recomendaros que si no lo tenéis, lo compréis (o pedid que os lo regalen por vuestro cumple/santo/reyes). Durará eternamente y nunca os cansaréis. Y si eso llegara a ocurrir, comprad más juegos… o conseguid alguna de las expansiones que este Kingdom Builder tiene. Recomendada la que se llama Nomads, que incluye la posibilidad de jugar con un 5º jugador, más terrenos, más cartas y más objetivos.
¡A jugar mucho todos y esperamos que vuestros familiares/amigos y vosotros mismos os hayáis cuidado mucho estos 3 meses tan raros!